“Así como la obesidad se ha convertido en un problema grave para las personas, también es un problema creciente entre los animales domésticos, uno que puede perjudicar seriamente la salud de su mascota”, advierte la Dra. Carmela Stamper, del Centro de Medicina Veterinaria (CVM) de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés). Las responsabilidades del CVM incluyen asegurarse de que los alimentos para animales estén debidamente etiquetados con declaraciones fidedignas, y de que sean inofensivos tanto para los animales como para las personas que los manipulan.
¿Qué tanto es demasiado gordo?
En los animales domésticos, un 20 por ciento por encima del peso ideal se considera obeso. Pero el peso ideal es relativo, dependiendo de la raza, la edad, la complexión y el metabolismo del animal.
“En los perros, algunas razas parecen más propensas a la obesidad que otras”, observa la Dra. Stamper. Los labradores y los beagles son dos ejemplos, así como los perros chaparros y de cuerpo alargado como los basset hounds y los perros salchicha. En contraste, aunque los veterinarios informan de más felinos obesos y con sobrepeso, ninguna raza de gato específica es propensa a engordar.
La castración puede ralentizar el metabolismo de un perro o de un gato, al igual que la edad, en especial si el animal hace menos ejercicio que cuando era más joven. Es importante hablar con su veterinario acerca de cuánta comida debe consumir su perro o su gato.
Cómo mantener un control: preguntas importantes para su veterinario
El verdadero experto en el peso ideal de su mascota es su veterinario, quien registra los cambios que se suceden con el tiempo de una manera que usted —quien ve a su mascota todos los días— tal vez no pueda.
¿Cómo sabe el veterinario si el peso de una mascota ha rebasado el normal y deja de ser saludable? Muchos emplean sistemas de puntuación para la condición corporal tanto de perros como de gatos, tales como una escala del 1 a 5 (en la que “1” significa “muy flaco” y “5” significa “obeso”). ¿Dónde se ubica su mascota en la escala?:
- “Pídale a su veterinario que le explique el sistema de puntuación que utiliza”, recomienda la Dra. Stamper, y pregunte por los detalles de a qué prestar atención, como:
- ¿Cuáles son algunas señales específicas de que mi mascota está subiendo de peso?
- ¿Cuál es un buen peso normal para mi mascota?
- ¿Qué tipo de alimento me recomienda y de qué tamaño debe ser la porción?
- ¿Cuantas veces al día debo alimentar a mi mascota? (La Dra. Stamper advierte que la cantidad recomendada al lado de la bolsa de comida puede no ser la adecuada para su mascota en particular, dependiendo de la edad, el nivel de actividad u otros factores).
- ¿Tiene mi mascota alguna enfermedad (tal como artritis) que haga que sea aconsejable que mantenga un peso más bien bajo?
“Hay una buena razón por la cual se pesa a su mascota cada vez que visita al veterinario”, explica la Dra. Stamper. Los amos deberían adoptar el hábito de preguntar qué tal está el peso de su mascota, y si hay algún motivo de preocupación si es significativamente alto (o bajo).
Estar demasiado delgado o perder peso también pueden ser indicios de un problema de salud, añade la Dra. Stamper. En particular, un perro o un gato que normalmente disfrutan comer, pero que de pronto muestran una falta de apetito, pueden estar manifestando síntomas de un problema grave de salud que podría justificar una visita al veterinario para asegurarse de que todo esté bien.
Indicios a los que hay que estar atentos
Entre tanto, hay algunos indicios básicos a los que hay que prestar atención para determinar si el peso de su mascota es o no saludable.
- Vea a su mascota desde arriba. ¿Tiene una cintura definida? “Si no, y si su espalda es ancha y plana como un taburete, probablemente tenga sobrepeso”, advierte la Dra. Stamper.
- Pase su mano por el costado de su mascota. ¿Puede sentir fácilmente las costillas o tiene que presionar fuerte para hacerlo? ¿Son demasiado prominentes?
- ¿Tiene su mascota el abdomen “sumido” o el vientre caído? Si puede agarrar con facilidad un puñado de grasa, ésa es una señal de que su mascota tiene sobrepeso.
Todo con moderación, dice la Dra. Stamper. Para la mayoría de las mascotas, el bocadillo ocasional no es problema. “No es raro que las personas que se concentran mucho en su propio peso se centren excesivamente en el de sus mascotas”, añade. “La clave es hablar con su veterinario si le preocupa”.
Recuerden, queremos que nuestras mascotas tengan una vida feliz, pero sobretodo una larga vida…
Este artículo está disponible en la página de Artículos para el Consumidor de la FDA, en la cual se publican las últimas novedades sobre todos los productos regulados por la FDA.